1/8/16

El Poder Del Perdón

                 
                       
                                El Perdon

Saludos y bendiciones a todos los que están leyendo este Blogger es para nosotros un honor poder llegar a ustedes por este medio. 

En este vlog les traemos una enseñanza acerca del perdón y la importancia de perdonar y pedir perdón cuando hemos cometido alguna falta a alguien o a Dios.

Vamos a basarnos en el Salmo 32:1 Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado. Como podemos ver en este salmo llama bienaventurado al hombre que sus pecados le son personados, tenemos que venir a los pies de Cristo y pedir perdon, día a día y confesar nuestros pecados de corazón y no sólo de labios. Para recibir el perdón de Dios.

   El Señor nos perdona de todo lo que hems hecho, es decir de todos nuestros pecados. Pero es de nosotros venir a los pies de Cristo y pedir perdón para ser perdonados y recibir sanidad en nuestro corazon. Para estar limpios de todo odio y rencor que tengamos dentro.

   El Señor quiere que estemos preparados para su venida, que no tengamos raíces de amargura, es decir estar limpios de corazón para poder irnos con el en su venida.

   En Proverbios 28:13 a qui podemos ver que debemos de confesar nuestros pecados porque a que cubre sus pecados no prosperará,  a Dios no lo podemos engañar ya que El sabe todo de nosotros. 

     En Joel 2:12 A qui podemos ver que El Señor nos llama al arrepentimiento en ayuno y oración hacia Dios. También debemos de orar por los que nos angustian para que puedan recibir perdón de Dios.

   Hay muchos que dicen que ellos ya no tienen perdón. Pero Dios dice que el se olvida de nuestros pecados y los echa al mar y nunca más se acuerda de ellos. Romanos 4:7-8.

   En Mateo 6:14-15 nos exsorta a perdonar a los demás incluso a los que nos hacen daño para que también podamos recibir perdón, pero si no perdonamos no podemos recibir perdón de Dios.

   Los hijos de Dios debemos estar limpios con nuestras vestiduras sin manchas y sin arrugas. Debemos vivir para Dios y no para el mundo, y no contaminarnos con las cosas del mundo.
 


Segunda Parte.